Un sofá en medio del escenario daba la impresión de que Bebe nos recibía en la sala de su casa para ofrecer un show íntimo en el que develaba cómo es al momento de componer o de imaginar sus canciones. De suave, romántica y pensativa acostada sobre él, podía pasar a convertirse en una bailarina, seductora y amistosa ‘frontman’ que saltaba y se movía por la tarima.
Entre el público los más fans gritaban en cada corte las canciones que querían escuchar y algunos otros no aguantaron la formalidad de las sillas del Jorge Eliécer Gaitán y se levantaron para bailar al ritmo de Bebe y su banda.
La artista cerraba su gira por Latinoamérica en Bogotá por lo que su entrega fue notoria. “Gracias por hacer que esto valga la pena”, dijo la española a los asistentes que le devolvían los agradecimientos con aplausos y piropos.
En una de las conversaciones con el público contó que junto a su banda, en ocasiones se sentían en el año 2128 al ver que cada cual no quitaba el ojo de la pantalla de su celular o veían el concierto a través de él, cosa que igual no cambió mucho durante el show.
Varias canciones de su más reciente disco ‘Cambio de piel’ como ‘Que llueva’, ‘Borrones’, ‘Respirar’, ‘Chica precavida’, ‘Bala perdida’ junto a las infaltables ‘Malo’, ‘Siempre me quedará’ y ‘Ella’ hicieron parte del repertorio que incluyo 21 canciones en total.
Hace dos años vino acompañada únicamente de su guitarra y esta vez trajo a una banda completa con la que dejó otra grata sensación en el país.
A los 38 años las historias de sus canciones han variado y para fortuna de sus fans, seguirá haciéndolo lo que supone la posibilidad de un nuevo encuentro…
