Sebastián Regino Casas
«Conocí a Deftones en su primer disco, ‘Adrenaline’, por allá en 1995. Vi en MTV la canción ‘Seven Words’ y de ahí en adelante me volví fanático de la banda.
Alguien tuvo la oportunidad de traerme ese disco desde Estados Unidos hasta Medellín, lo escuché de principio a fin y a partir de ese momento no he parado. Ese álbum hace parte fundamental de mi crecimiento y de mis influencias musicales. Cada álbum de Deftones me sorprende más.
Chino Moreno, su vocalista, es la persona que llamaba la atención de primerazo, pero esta banda tiene la particularidad que aparte del cantante quien también se destacaba era su bajista Chi Cheng. No sé si era por su altura o por sus dreads pero estos dos personajes eran los que más impactaban en tarima. Hacían una dupla genial. Años después me enteré que eran los mejores amigos y precisamente esa amistad que había entre ellos era lo primero que uno veía cuando estaban en un concierto.
En el 2007 se conoció que Deftones iba a tocar en Bogotá en el Palacio de los Deportes. Deftones ha sido una banda que en mi vida ha tenido amores y odios, tengo amigos que son fanáticos a morir pero tengo otros que la odian completamente. Llamé a Paulo Arbeláez, también guitarrista de Johnie All Stars, que es muy seguidor de esta banda y le conté la noticia. Armamos paseo y nos fuimos a ser felices a la capital.
Este concierto lo llevaba esperando por más de 20 años. Ese día abrió el show una banda llamada Raíz, luego tocó Injury y después llegó el turno de Deftones. Fue genial. Salieron al escenario sin avisar, simplemente fue una aplanadora total en el escenario y todo empezó a fluir. Lastimosamente, en este concierto Chino Moreno no tuvo mucha interacción con el público, quien tenía una cara más amable y un don de gente más grande en toda la banda fue Chi Cheng. Ese man sentía cada canción y disfrutaba cada instante del show.
Cuando ellos estuvieron en Colombia estaban lanzando el disco ‘Saturday Night Wrist’, un álbum experimental que no tuvo mucho eco entre los fans de la banda, sin embargo, este trabajo fue muy protagonista en su presentación. Me atrevo a decir que esta producción fue una gran despedida de Chi Cheng porque se nota mucho su mano en toda la composición, se nota la onda en la que él estaba entrando. Leía en unas entrevistas tiempo después que Chino Moreno afirmada que Cheng estaba en un modo más hippie y estaba tratando de explorarse y de sentirse por medio de la música y en este disco se nota mucho.
Chi Cheng salió, se movió por toda la tarima, estuvo compenetrado con el público sin decir una sola palabra, yo lo veía y era como en los videos, con una cara de amabilidad, un personaje que uno parece que lo conociera de toda la vida.
El concierto duró dos horas y curiosamente no tocaron la canción más esperada por la gente que es ‘Back to School’ pero fue increíble. Lastimosamente no había mucho público, de hecho, se podía caminar tranquilamente por el lugar y a los que nos gusta Deftones lo disfrutamos mucho.
Al final, cogimos nuestro carro y nos devolvimos para Medellín hablando y recordando todos los momentos del show, lo que nos gustó, lo que nos reímos y hablamos mucho de Chi Cheng, de cómo había sido el frontman del concierto en Bogotá, sin desmeritar el trabajo hecho por Chino.
En 2008 me enteré del accidente que tuvo Cheng y de cómo había quedado en coma y después de haberlo visto en vivo fue un gran choque y me parecía un personaje difícil de reemplazar porque era uno de los más carismáticos en el grupo. A partir de ese momento, el sonido de Deftones cambió, las influencias musicales de Chino Moreno se marcaban más y los álbumes que siguieron han sido geniales pero se alcanza a notar la ausencia de ese man alto y carismático.
Hubo un tiempo en que no se sabía nada de él, noticias iban y venían pero ninguna fuente oficial. Ya en 2013 cuando Chi Cheng se fue de este mundo fue algo muy triste. Debo decir que en mí quedó para siempre porque siento que me dio una gran lección de cómo vivir la música en tarima, de cómo tener un gran carisma y de cómo saber transmitir y gozar lo que se hace».
Mira también:
«Yo vi a Bob Marley»: Catalina Ceballos.
50 grandes canciones que construyeron el punk rock colombiano.