Por: Eric Bluezummers – Tribute Theory/ Linkin Park Colombia.
Bueno, la verdad no sé ni cómo comenzar esto. Simplemente diré que todo lo que me salga en este momento viene directo del corazón. No soy una persona a la que se le facilite escribir en lo absoluto, pero definitivamente la ocasión lo amerita.
Son las 10:40 pm y me encuentro sentado frente a mi computador con una cerveza, mis cigarrillos, y con mi iTunes reventando el ‘Hybrid Theory’, un álbum que rompió con la música hace 17 años. Aquel disco me llevó a alejarme de la música que nos imparten nuestros padres, de ser un niño de 10 años que solía escuchar únicamente merengue y salsa a ser una persona que encontraba el amor en una banda. Claro está, primero conocí nombres como Blink-182, Gorillaz, Crazy Town, y muchas más, pero ninguna logró atraparme tanto como ese día en el que estaba viendo televisión y apareció un tipo mono, con el pelo lleno de spikes, el cual tenía una voz absurda que nunca había escuchado. Esos gritos que acentuaban la profunda letra de la canción, que en cada coro me asombraba cuando pasaba de una voz totalmente melódica a una voz inexplicable coreando las palabras “Crawling in my skin” (que curiosamente comienza a sonar en este momento). Ese día mi vida dio un giro de 180 grados y comencé a seguir a Linkin Park y a Chester Bennington.
Muere Chester Bennington de Linkin Park, otra voz de nuestra adolescencia que dice adiós.
Si me pusiera a contarles todo lo que he vivido gracias a ellos no terminaría nunca y los aburriría con tantos detalles. Duré muchos años siguiéndolos, amándolos, criticándolos, pero ningún día de mi vida desde el momento en que los conocí han faltado en mis días, en mi trabajo, mientras camino, mientras juego e incluso en los momentos más íntimos que una persona puede tener.
Siempre soñé con verlos en vivo en Colombia ya fuera en el Parque Simón Bolívar, en el Coliseo El Salitre o hasta llegaba a soñar con ser millonario y traerlos a tocar en el salón comunal de mi conjunto. Este año estuvimos muy cerca de tenerlos en nuestro país, pero eso va más adelante en mi historia.
Recuerdo cuando me tocaba ahorrar de mis onces en el colegio para poder comprar los discos pues en esos tiempos era muy difícil conseguir música de otra manera. Esa sensación de felicidad al llegar a ver el arte, poner el CD en mi grabadora, ¡wow! son cosas que la mayoría de gente de ahora no entiende. Con el tiempo comencé a admirar más a Mike Shinoda que al propio Chester, decidí aprender a tocar guitarra por mi cuenta y seguir sus pasos. Ellos me guiaron en este largo camino llamado música.
Luego de muchos años pude entrar a una banda de punk rock llamada Sad They para ser la guitarra rítmica y de esa manera tratar de estar más cerca de ellos. Aunque el género no iba con la propuesta de Linkin Park, siempre traté de meter las influencias que ellos me dejaban con cada canción. Tiempo después por fin hicimos algo de punk rock con versos de rap, ‘Anthem’, un cover de Zebrahead y por primera vez me pude desenvolver en la banda cantando como voz líder en el estilo que me gustaba. Gracias a esto, al comenzar con la grabación de nuestro EP, ‘Un día más’, compusimos una canción llamada ‘Todo era una ilusión’ que llevaba un pedazo rapeado, planeado para que el vocalista los cantara, pero al momento de hacerlo dijeron: “marica grabe eso usted ya que es el rapero de la banda”; palabras que me causaron mucha risa, hasta el punto en que me di cuenta que hablaban en serio y de esa manera me tocó enfrentarme a estar con un micrófono y grabar mi voz. ¿Saben? Lo único que me pasaba por la cabeza en ese momento era: «¿A ver Erick, cómo haría esto Mike Shinoda?». Y pues fue sorprendentemente, todo fluyó con naturaleza.
Como dato curioso, siempre quise parecerme físicamente a Chester y muchas veces traté de imitarlo, pero esa travesía fue un fraude pues mis amigos de ese entonces comenzaron a decir: ‘oiga usted se parece al rapero de Linkin Park‘ (cosa que en el momento era como ‘agg’, pero ahora me halaga). Fue tanto mi amor por la banda que mi madre comenzó a ser fan de ellos y a cantar las canciones a su manera, de hecho, ‘Somewhere I Belong’ se volvió su favorita y siempre me pide que ponga “su canción”.
Linkin Park siempre ha estado en mi vida. Desde hace como 15 años junto a una amiga, Mane, comenzamos un proyecto llamado Latin Park Soldiers, que ahora es conocido como Linkin Park Colombia, un grupo de fans que hace todo por la banda. Este parche de seguidores comenzó a crecer de una manera tan rápida que pasamos de ser dos personas a un staff de siete y un grupo de fans de más de cinco mil a nivel mundial. Gracias a LPC hace como siete años recibí un mensaje en mi Facebook para hacer una audición en una banda Tributo a Linkin Park y decidí presentarme a pesar de que no me consideraba cantante. Es más, aún no lo hago, eso es algo muy rudo que solo lo logran personas virtuosas como Chester. Curiosamente logré superar la audición y pasé de ser guitarrista líder a ser el vocalista principal junto a Juank Del Rio. (JK, Carlos Mario, Pipe y Fercho, gracias por permitirme hacer parte de este sueño llamado Tribute Theory). En esta parte de mi vida logré conocer a muchas personas que ahora considero mis amigos, muchas bandas, y muchos músicos que si no fuera por Linkin Park, no harían parte de mi vida.
Muchas personas no alcanzan a dimensionar lo que logra la música en la vida de las personas: forjar amistades eternas como Ongi, Christian Nieto, Felipe Ksas, Sebastián Camelo y muchos más. Hoy gracias a Linkin Park puedo decir que salí de mi país. Hace un año, por alguna razón de la vida, algo en mí comenzó a decir “la próxima vez que LP venga a Sudamérica debes ir a verlos, ya esperaste mucho”. Y con mucho esfuerzo logré hacer ese sueño realidad junto a mi novia Karoll, quien curiosamente también conocí gracias a ellos y a su canción ‘Waiting For The End’ (tema que en cada show le dedico a mi sobrinito en el cielo).
Decidimos viajar a Chile y cumplir nuestro sueño de ver a Linkin Park en vivo y que, en definitiva, ha sido el mejor regalo de cumpleaños que me he dado en mis 28 años de vida. En esta experiencia Linkin Park Chile y mi amigo Nebo nos brindaron la mano de una manera absurda, dándonos estadía, consejos y muchos momentos inolvidables. Cada momento desde la espera en la fila hasta cuando salieron a tocar son indescriptibles y recordar todo eso en este momento me llega justo al corazón. Ver a mi banda favorita después de 17 años de espera fue magnífico, no tengo palabras para describirlo, solo sé que las lágrimas que salieron ese 9 de mayo de 2017, fueron de felicidad total.
Tuve la fortuna de que, mientras cantaban ‘Breaking The Habit’, Chester decidió bajarse al público y se me acercó, me dio la mano y con todas mis fuerzas lo alcé para que cantara frente a mí. Lo abracé y me sonrió con ese carisma que lo caracterizaba en cada uno de sus shows. Escucharlo a centímetros es algo brutal, lograr tener esa melodiosa voz tan cerca es genial, no a través de un CD, un DVD o un micrófono, sino escuchar cada vibración de sus cuerdas vocales frente a mí hace que de solo recordarlo se me escurran las lágrimas y se me pongan los pelos de punta. Con orgullo puedo decir que ese concierto ha sido la mejor vivencia que he tenido.
El 20 de julio de 2017 lastimosamente recibí un mensaje de Fercho (baterista de Tribute Theory) preguntándome si era verdad, cosa que no entendí hasta que me envió una nota de voz. Al principio me causó algo de gracia, pues por allá en el 2002 si mal no recuerdo ya habían matado a Chester. Lo único que hice fue entrar desde mi celular a Facebook a buscar en las cuentas oficiales, y demás portales, siendo TMZ el primero que hablaba de la trágica noticia. ¿Saben? No quería creerlo y cada titular que veía al respecto me parecía una muy mala broma de alguno de esos hijos de puta que detrás de un computador se mofan de la muerte de las personas, esos mismos que gozan de ver videos amarillistas de muertes y demás y que, seguramente, ya habrán hecho memes de la situación. Mi celular comenzó a sonar, era mi madre quien con una voz muy preocupada y triste me preguntó si era verdad, pero no pude dar respuesta, solo un simple balbuceo que trataba de decirle que me sentía mal. Ella trató de calmarme, pero mi angustia no me lo permitió. Llegó Karoll con el almuerzo, le conté y nuevamente intentó calmarme con lágrimas en los ojos, pues sabía que de ser cierto, la noticia de que esa persona a quien admiraba se había ido de este mundo, le carcomía el corazón.
El tiempo pasaba y ninguna fuente oficial lo confirmaba, pero más portales reconocidos hacían énfasis en la historia. Solo pude enviarles el mensaje a mis amigos de Tribute Theory, LPC, y a mi amigo Murder el cual se destruyó al leerlo, pues su ídolo de toda la vida se había ido. Fueron muchos minutos de silencio, de una mente en blanco, de no saber qué hacer, de incertidumbre, mensajes en mi Facebook y llamadas a mi celular de personas preguntándome o dándome el pésame. Algunos de los que estén leyendo esta nota dirán “qué idiotas, le dan el pésame a una persona por la pérdida de alguien que no hacía parte de su vida” y pues, a pesar de que tienen la razón en cierta forma, también están equivocados, pues para muchos la música es parte esencial de la vida y él era cómo su héroe, ídolo o modelo a seguir, alguien que con sus letras logró mover las fibras de los corazones de muchas personas.
Después de unos minutos lo que más temía se hizo realidad, la confirmación por parte de Mike Shinoda con un mensaje en su cuenta de Twitter, que en español decía algo como: “Conmocionado y con el corazón roto, pero es verdad. Habrá una declaración oficial tan pronto la tengamos”.
Shocked and heartbroken, but it's true. An official statement will come out as soon as we have one.
— Mike Shinoda (@mikeshinoda) July 20, 2017
Al leer eso sentí un vacío tan grande. La voz que me ha inspirado, que me ha llevado a tantos lugares y a hacer tantas cosas se había apagado. Fue imposible contener las lágrimas, pensar en todos estos años, en toda mi vida, en cada instante, en cada minuto, y con la frustración de no poder hacer una mierda. La voz de una generación había dejado este mundo, ese carisma que Chester emitía en cada show se veía opacado por sus demonios internos, pues Bennington no tuvo una vida tan normal como la de muchos de nosotros. Mi mente se nubló totalmente, no sabía a dónde mirar, ni qué hacer.
En Radioacktiva hablaban de la noticia y decidieron cambiar su programación para rendir homenaje a esta leyenda que se había ido. LPC tenía mensajes por doquier, los cuales no sabíamos de qué manera responder, la gente comenzaba a hacerse sentir en las redes sociales y poco a poco los famosos comenzaban a dar sus condolencias. Este día que comenzó tan bien con tantos planes en la cabeza se había tornado drásticamente en un día de mierda. Fueron horas y horas de absoluto silencio, en las cuales solo me acompañaba su voz en cada uno de sus éxitos. ¿Qué pasó? No lo sé, no logro entender que podía pasar por su mente al dejar este mundo de esa manera. ¿Qué pasó con esa persona que amaba ayudar a la gente? ¿Qué va a pasar ahora? Miles y miles de preguntas rondaban por mi cabeza, preguntas que aún no tienen respuesta y que quizá jamás la tendrán.
Creo que nadie en este mundo tiene el poder ni el derecho de juzgar la decisión de Chester, nadie sabe lo que estaba pasando por su cabeza, y nadie puede imaginar la cruz que cada persona carga.
Solo me quedan un par de cosas por decir, comenzando por lo que dijo Slipknot en su comunicado oficial: “la depresión es algo que se debe tratar, por favor nunca se queden callados, siempre habrá alguien para escucharlos”. Si usted está en una situación en la cual su vida y su entorno lo agobian y por su cabeza pasan malas ideas, lo invito a que piense en que hay alguien en este mundo que se preocupa por usted, que lo quiere, lo ama, y agradece a la vida porque usted sea parte de la suya. Sé que para muchos no será de su agrado Good Charlotte, pero de corazón los invito a que escuchen ‘Hold On’, quizá su perspectiva cambie.
Por otro lado, sea usted cristiano, católico, ateo, agnóstico o demás creencias, le pido encarecidamente que como fan de Linkin Park y Chester Bennington le pida a su Dios energía y demás por la paz del alma de Chazy Chaz. Quiero mandarle mis condolencias a Mike, Brad, Dave, Joe, Rob, Talinda y a toda la familia Bennington/Linkin Park. Recuerden que “the hardest part of ending is starting again”.
«Era alguien que cantaba como un ángel, y gritaba como un demonio», Erix Bluezummers.
Si usted llegó hasta acá y leyó todo esto de una persona que posiblemente no conoce, mil gracias por dedicar su tiempo y leer a alguien que lamenta esta gran pérdida. ¡Y recuerde que su vida vale mucho!
Chaz siempre estarás en mi corazón, serás un legado que le dejaré a mis familiares y a todo aquel que me conozca. Descansa en paz y en donde quiera que estés sigue deleitando a todos con tu hermosa voz.
Con amor y admiración,
Eric Bluezummers – Tribute Theory/ Linkin Park Colombia
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