Escuchar música en vivo es uno de los placeres más grandes que hay en la vida, sin embargo, en algunas ocasiones nos encontramos con aspectos que generan molestias en los asistentes y terminan empañando un concierto o simplemente disgustando al público que se da cita para disfrutar de un buen show.
Hicimos una lista de motivos con los cuales, por lo general, la gente se molesta cuando va a asistir a un concierto. Juzguen por su propia cuenta y saquen sus conclusiones.
1. Tener que pagar un ‘recargo’ adicional al precio de la boleta por el servicio que presta la entidad que distribuye las entradas. Entre más costosa es la localidad, más alto es el valor del recargo.
2. Aguantarse a las personas que graban todo el concierto en sus celulares, tabletas y GoPro para ‘chicanear’ en las redes sociales con sus amigos que no fueron al show. Está bien que tomen una que otra foto, pero no es posible que registren todo el evento.
3. Ver toda la noche a una pareja besándose. Hay otros espacios destinados para este tipo de actividades y en un evento no es el lugar más apropiado. Uno a los conciertos va es a cantar, saltar, gritar y a escuchar al artista no a ‘besuquearse’ como quinceañera estrenando novio.
4. Esperar por mucho tiempo al artista principal. Se volvió costumbre que en los conciertos citen a la gente a una hora determinada, sin embargo, el show termina iniciando tres o cuatro horas después. Definitivamente, es una total falta de respeto.
5. Creer que el evento ya va a iniciar y todo resulta ser una nueva prueba de sonido.
6. Encontrar los baños del lugar del concierto en pésimo estado. En ocasiones es mejor aguantarse y no arriesgarse a contraer alguna infección.
7. El precio de las bebidas es exagerado. A veces el valor de una cerveza, un trago o una simple botella de agua es triplicado por el organizador del concierto.
8. Peor aún es comprar trago afuera del show e intentar meterlo a como dé lugar.
9. Las personas que hacen ‘pogos’ en lugares no permitidos. Es aburridor tener que aguantarse a gente inadaptada empujando y dando patadas en zonas no establecidas para este tipo de baile, y lo peor, con tragos en la cabeza.
10. Los revendedores que quieren hacerse ‘la navidad’ en tres horas y ofrecen boletas a un alto costo y con el riesgo de que sean ‘chiviadas’.
Mira también: